02 abril 2011

T

Cuando nos referimos al fracaso como algo malo, inevitablemente tenderemos a evitarlo. El proceso solamente puede conducirnos en una dirección adoptando una postura defensiva.
Es decir, optaremos evitando males en lugar de persiguiendo bondades. Elegiremos por temor y por descarte, y no por ansias, o por curiosidad.
Si nuestra actitud toma la forma defensiva en una guerra sin fin, o toma el proceso evitativo, sobreviviremos, pero raramente ganaremos.